Norberto Larroca - Presidente del Congreso Internacional CAES "Salud, Crisis y Reforma"
El tiempo es difícil, es malo y largo. Nuestro camino lo transitamos dentro de una lágrima.
Llevamos muchos años en la lucha por la subsistencia, esposados a la mediocridad creciente de la duradera decadencia.
Construimos Clínicas, Sanatorios y Hospitales. Los diseminamos por todo el país. De la Quiaca a Ushuaia y albergamos ciudadanos de distintos orígenes, color e idiomas, de toda diversidad.
Atendemos todos los días, de todos los meses y todos los años de nuestra existencia. Con nuestro capital que se construyó con trabajo acumulado, generamos miles de puestos de trabajo, que como en pocos sectores, el avance tecnológico de la modernidad no sustituye, sino que amplía en constantes nuevas especialidades.
En nuestra historia brindamos millones de atenciones asistenciales. Cubrimos accidentes y catástrofes sociales.
La inversión y reinversión permanente nos mantiene en la terapia intensiva de las Pymes Argentinas. Con frustración, pero con dignidad todos los días asumimos la tarea, recibiendo nuevas vidas, tratando enfermedades y luchando con la muerte.
Como Argentinos que queremos nuestro suelo con las raíces Bicentenarias, hacemos lo que sabemos hacer. Y construimos nuestras herramientas sanitarias con nuestros recursos ya escasos que corren enorme riesgo, pero cumplimos con nuestra dedicación todo el tiempo.
Cada Sector, cada Argentino, debe dar lo mejor para salir de la Pandemia inesperada y de la ruinosa economía, de larga data declarada y que genera marginación, pobreza y subdesarrollo.
Viajar en una lágrima va hacer inevitable, pero la lucha contra la adversidad será tan importante como fue la decisión de construir el Sector Privado de la atención pública de nuestro país.
Defender nuestra obra, que es un activo de la Nación, debe ser la meta que, como la libertad, se gana todos los días.
Debemos sonorizar en todo el país nuestro servicio imprescindible e indelegable, que genere la conciencia de protección del Sector.
El gobierno nacional y los gobiernos provinciales deben sostener a las Clínicas y Sanatorios, que producto del aislamiento social obligatorio, trabajan a un 35 o 40% de su capacidad instalada, ante el congelamiento de las atenciones generales de los pacientes.
Mientras las obras sociales y prepagas recuperan su economía, paradójicamente, el Sector que debe brindar las prestaciones sociales esenciales para toda la sociedad va camino a la quiebra.
Que la reconstrucción social y económica que el país necesita priorice la salud de la población y de quienes tienen la tarea de brindarla. Valorizando y dignificando a profesionales y trabajadores sanitarios y, consolidando definitivamente la estabilidad asistencial de los Establecimientos de Salud de toda la Argentina.
Norberto H. Larroca
Presidente del Congreso CAES
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